Cuando hablamos de videojuegos rápidamente empezamos a valorar cuáles son los aspectos educativos, los aspectos positivos y los negativos en relación con la educación, además de los aspectos psicosociales.
Hay tópicos sobre la influencia negativa de los videojuegos, como que los videojuegos fomentan la violencia y la agresividad, que jugar tanto a los videojuegos va a dejar tonto al niño, que los videojuegos provocan fracaso escolar, que favorecen las conductas antisociales e introvertidas o inclusive que el niño se va a quedar ciego de tanto videojuego.
Los efectos negativos que podemos encontrar en el uso de los videojuegos es el efecto de cuando se juega en exceso o se hace un mal uso de ellos, lo cual puede provocar adicción, también los peligros que pueden encontrar en la red, comportamientos impulsivos o problemas de atención, la mayoría de los juegos muestran poca enseñanza de valores educativos, pueden provocar sedentarismo e inclusive aislamiento social.
En lo que a nosotros como educadores nos concierne puedo decir que actualmente existen grupos de investigación que trabajan para que los profesores conozcan nuevas estrategias didácticas y aprovechen al máximo las interacciones que los estudiantes realizan con los videojuegos en un momento determinado dentro del aula, el videojuego en educación es una herramienta «muy motivadora» y que tiene unas implicaciones directas en la aplicación de determinadas competencias, por ello, nosotros como futuros maestros debemos de aprovecharla y sacar el máximo partido de ellas.
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